Fiador, aval y obligado solidario: evita errores en tus contratos de arrendamiento

En los contratos de arrendamiento, es común encontrar una cláusula que exige un "aval" o “fiador” para responder frente al arrendador en caso de incumplimiento del arrendatario. Sin embargo, estos términos suelen generar confusión jurídica y práctica al momento de incluirlos en los contratos, e incluso al confundirlos.

Utilizar mal las figuras de fiador, aval y obligado solidario puede dejar a los arrendadores sin garantía real de cobro en caso de incumplimiento. Aquí te explicamos las diferencias, efectos y riesgos de no usarlas correctamente.

¿Qué es un fiador?

El fiador es una figura regulada en el Código Civil. Es la persona que se compromete a responder por las obligaciones del arrendatario si este último no cumple. Su característica clave es que:

  • Puede exigir que primero se persiga al deudor principal (beneficio de excusión), salvo que renuncie expresamente a ello.
  • Solo responde por lo pactado en el contrato.
  • No puede ser obligado a más de lo que se obligó el arrendatario.
💡 Ejemplo: Si el arrendatario deja de pagar la renta, el fiador responde, pero puedes tener que demandar primero al inquilino antes de ir contra el fiador, a menos que se pacte lo contrario.

¿Y el aval?

El “aval” no es una figura aplicable en contratos civiles, como el arrendamiento. Es un término del derecho mercantil que aplica a títulos de crédito (cheques, pagarés, letras de cambio). Cuando se establece a alguien como “aval” en un contrato de arrendamiento, no se está utilizando el término correcto.

Riesgo: Muchos contratos dicen “aval”, pero no definen obligaciones ni renuncian a beneficios legales.

Obligado solidario: la figura más efectiva

El obligado solidario sí tiene efectos legales fuertes. Al firmar como tal:

  • Responde igual que el deudor principal y al mismo tiempo.
  • No puede exigir que primero se demande al arrendatario.
  • Puede ser demandado directamente desde el primer incumplimiento.

Es la figura más segura para el arrendador si está bien pactada. Es preferible al fiador porque elimina el beneficio de excusión.

Riesgos de usar mal estas figuras

  • Contratos con "aval" mal definidos: generan falsas expectativas.  
  • Fiadores que no renuncian a derechos: dilatan los procesos de cobro.
  • Obligados solidarios mal redactados: sin cláusulas claras, pueden salir absueltos.

Buenas prácticas legales

  • Evita usar el término “aval” en contratos civiles.
  • Prefiere obligado solidario o fiador con renuncia expresa al beneficio de excusión.
  • Establece en el contrato: montos y vigencia de la garantía, y datos de identificación del garante (obligado solidario o fiador).
  • Verifica la solvencia del obligado solidario o fiador.

Las palabras importan, especialmente en los contratos. Utilizar mal las figuras legales puede hacer que una garantía no tenga efecto jurídico, dejando al arrendador desprotegido ante un incumplimiento. Una buena redacción no solo da seguridad jurídica, también puede evitarte años de litigio.

¿Quieres proteger legalmente tus contratos de arrendamiento?

En Singular Law te ayudamos a:

  • Redactar contratos con garantías reales y exigibles.
  • Asesorarte sobre cuál figura legal te conviene usar.
  • Prevenir disputas judiciales innecesarias.

Escríbenos para revisar tu contrato actual o estructurar uno nuevo con respaldo legal real.

Share this post
Contacto

Envíanos tu consulta sin compromiso

Estamos listos para ayudarte. Nuestro equipo de trabajo tiene un tiempo de respuesta de 24 horas.

contacto@singularlaw.mx
+52 33 3560 7777
Torre Cube 2, piso 12b, Av. Paseo Royal Country 4596, Puerta de Hierro, 45116 Zapopan, Jal.
Thank you! Your submission has been received!
Oops! Something went wrong while submitting the form.